GP-1

Ficha técnica
Referencia: GP-1
Año de fabricación: 1.965
Precio: 1.413 ptas.

¿Quien no ha tenido un Scalextric en su casa? Su popularidad le ha convertido en uno de los juguetes más requeridos, convirtiendo su marca en la palabra genérica que denomina el juego en sí: el slot (palabra inglesa que significa ranura o carril)

Para conocer la historia de Scalextric nos tenemos que remontar en la Inglaterra del año 1.952, donde MINIMODELS reproduce pequeños coches a escala, a los que posteriormente, les añade un motor mecánico a cuerda.
Posteriormente, el motor mecánico se sustituye por uno eléctrico, fabricado por Tri-ang, una empresa dedicada a la elaboración de trenes eléctricos.
El siguiente paso consiste en dotar a los bólidos de guías y en crear pistas con raíles. Este hecho revoluciona el juguete inicial con lo que actualmente se conoce como Scalextric.
En 1960, tras varios procesos de mejora, Tri-ang se convierte en la empresa líder del mercado. Transforma las pistas de goma de mala calidad, en pistas de plástico duro casi indeformable y los coches metálicos artesanales, en coches de plástico fabricados con moldes. De esta forma consigue mejores acabados reduciendo el precio de venta y aumentando el éxito en el mercado.
Nace entonces la marca SCALEXTRIC, palabra compuesta por “SCALE”, en referencia a la palabra escala, “X” en referencia a que, inicialmente la escala era variable, y “TRIC” en referencia a la marca TRI-ANG, encargada de su fabricación.

Tri-ang crea filiales fabricantes en países como Francia, España, México… En nuestro país, Exin-Line Bros, S.A., es la filial encargada del desarrollo de los productos Scalextric. Ubicada en Barcelona, hace su primera aparición en el mercado en el año 1964, con el set GP-3 (siglas correspondientes a Gran Premio Nº 3)

En el año 1965, aparece el segundo de los sets de Scalextric: el GP-1.
Se trata de un circuito tipo óvalo, compuesto por 8 curvas, 4 rectas y dos coches Cooper Fórmula 1. El set viene equipado con dos controles de velocidad así como las vallas blancas de protección, y un frasco lubrificante. Curiosamente no incluye el transformador-rectificador, necesario para el funcionamiento del Scalextric.

La caja, fabricada en cartón duro, presenta la misma ilustración inglesa que su antecesor el GP-3, en la que aparece un Cooper rojo y otro verde trazando una curva, aunque, sustituyendo el fondo negro por el fondo azul claro. En el interior, las diferentes piezas se distribuyen mediante compartimentos en cartón naranja.

Los Cooper F-1, con la referencia CF-1 (Coche Fórmula 1), son de diseño inglés. Posteriormente se fabrican con la referencia C-58, y entre sus particularidades, destacan la guía fija y las clavijas de sujeción de la carrocería. Este modelo se fabrica, hasta el año 1968, con guía fija en los colores: verde, rojo, amarillo, azul oscuro, rojo oscuro, azul claro y amarillo claro. En el año 1968, curiosamente, sale con doble guía y en los colores: verde, rojo, azul oscuro y amarillo. A partir de 1969, este modelo deja de comercializarse.

Una vez en la pista, tras adquirir un transformador-rectificador, probamos el circuito para percibir las sensaciones que un Scalextric de esta época daba a quien lo adquiría. Lo primero que se percibe es la poca estabilidad que estos coches presentan en las curvas, con movimientos bruscos y salidas de pista casi sin motivo. Otra de las observaciones destacadas es el poco equilibrio que existe entre el recorrido interior y el exterior, con diferencias de hasta tres tramos de curva por vuelta. En recta su velocidad no aumenta mucho, debido en parte a que la longitud del circuito es reducida, y a que los motores de los coches tienen actualmente más de 40 años.

En la historia del automovilismo, el Cooper F-1 corre su primera carrera oficial en el GP de Monte Carlo en el año 1950, y la última en el año 1969 en el mismo circuito. En todos estos años ha vencido en 16 Grandes Premios de la mano de Stirling Moss o Jack Brabham, entre otros.